Liposucción

Moldear el cuerpo para obtener una silueta más estética es uno de los objetivos más comunes entre nuestros pacientes. Para ello la dieta y la actividad física son las primeras elecciones. Sin embargo, algunos depósitos de grasa son difíciles de eliminar.

La liposucción es una intervención la cual se extrae grasa acumulada o tejido adiposo no deseado en diferentes zonas del cuerpo como caderas, glúteos o abdomen.

Actualmente, existen diversas técnicas para llevar a cabo este tratamiento, desde uno más convencional que consiste en la aspiración de la grasa sobrante utilizando unos tubos delgados llamados sondas o cánulas que se introducen en el cuerpo mediante pequeñas incisiones ocultas en los pliegues cutáneos; hasta la utilización de dispositivos tecnológicos adicionales, como el Ultrasonido (VASER).

La intervención se hace bajo anestesia local, epidural o general; y puede durar de una a cuatro horas. Después de ésta, las cicatrices y los moratones pueden ser visibles pero dejarán de serlo progresivamente. Lo mismo sucede con la inflamación y los bultos que aparecerán pasados varios meses.

La pérdida de volumen y la retracción de la piel se van produciendo de manera continua y progresiva desde los primeros días, alcanzando los resultados definitivos después de tres meses, que según los hábitos saludables de cada paciente serán permanentes.

La liposucción es una de las mejores posibilidades de eliminar grasa y celulitis de forma cómoda y efectiva. Uno de los principales beneficios es una mejor salud relacionada con la pérdida de grasa, una mejor apariencia y la reducción del aspecto de la celulitis.